Blue Eyes, Black Hair Quotes

“...as long as nothing happens between them, the memory is cursed with what hasn't happened.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“She says people ought to learn to live like them, with the body abandoned in a wilderness, and in the mind the memory of a single kiss, a single word, a single look to stand for a whole love.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“In a thousand years time this day will have existed for a thousand years to the day. And the ignorance of the whole world about what they've said today will have a date too.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“she can remember everyone admiring a rare kind of evening they spoke of as something they ought to save from oblivion to describe to their children later. And that for her part she would have had it hidden, had that late summer evening buried and burned to ashes.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ellos ríen. Verse reír los vuelve locos de alegría.
Ella le pide que la avise cuando un día se lance a amarla y a saberlo, si alguna vez sucede. Después de haber reído, lloran juntos como cada día. Cuando ella se va el sol se precipita, estalla en la habitación. Cuando ella cierra la puerta, la habitación cae en la oscuridad, y el entra ya en la espera de la noche”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Yes, she can remember everyone admiring a rare kind of evening they spoke of as something the ought to save from oblivion to describe to their children later. And that for her part she would have had it hidden, had that late summer evening buried and burned to ashes.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ella dormiría, dice el actor. Parecería hacerlo, dormir. Está en el centro de la habitación vacía, sobre sábanas blancas extendidas en el mismo suelo.

Él está sentado junto a ella. La mira intermitentemente.

Tampoco hay sillas en esta habitación. Sin duda él ha traído las sábanas y luego, acto seguido, una a una, puerta tras puerta, ha cerrado las demás habitaciones de la casa. Esta habitación da al mar y a la playa. No hay jardín.

Ha dejado ahí la araña de luz amarilla.

Sin duda no sabe exactamente el porqué de lo que ha hecho con las sábanas, las puertas, la luz.

Ella duerme.

Él no la conoce. Mira el sueño, las manos abiertas, el rostro todavía extraño. Los senos, la belleza, los ojos cerrados.Si hubiera dejado abiertas las puertas de las demás habitaciones, ella habría, sin duda, ido a ver. Es lo que él ha debido de pensar.

Él mira las piernas que descansan, lisas como los brazos, los senos. La respiración es igualmente clara, prolongada. Y bajo la piel de sus sienes, sosegadamente, el flujo de la sangre que late, aminorado por el sueño.

Exceptuada esta luz central de color amarillo que cae de la araña, la estancia está oscura, es redonda, se dirigía, cerrada, sin fisura alguna entorno al cuerpo.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“─ No le conozco a usted. Nadie puede conocerle, ponerse en su lugar, usted no tiene lugar, no sabe dónde encontrar un lugar. Por ello le quiero y usted está perdido.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ils devraient toujours lire le livre à voix haute et claire, se tenir de toutes leurs forces exempts de toute mémoire de l'avoir jamais lu, dans la conviction de n'en connaître rien, et cela chaque soir.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ella lo mira. Es inevitable hacerlo. Él está solo y bello y agotado de estar solo, tan solo y bello como cualquiera en el momento de morir. Llora.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ça a toujours été trop tard pour ne plus vous aimer.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“Ele aproxima-se dela. Pergunta-lhe de que descansa, que cansaço é aquele. Sem responder, sem mesmo olhar, ela levanta a mão e acaricia-lhe o rosto por cima dela, os lábios, o contorno dos lábios, ali onde gostaria de beijar; o rosto resiste, ela continua a acariciar, os dentes serram-se, o rosto recua. E a mão dela cai.

Ele pergunta se é a esse contrato que ele fez da presença dela perto dele que ela chama sono. Ela hesita e diz que talvez, sim, que é assim que ela deve ter entendido a coisa, ou seja, que ele desejava tê-la perto mas escondida pelo sono, com o rosto anulado pela seda preta como se fosse por outro sentimento.

Ele ri, confuso por ter percebido a que ponto a conivência entre os dois era grande. Depois bruscamente vê que ela já não ri, que o deixa, que o olha como se ele fosse adorável, ou estivesse morto. E depois vê que ela regressa. Ainda tem no olhar um brilho de perdição que acaba de atravessar na presença dele.
Não falam daquele medo. Ela sabe menos do que ele que se passou qualquer coisa.Ficam muito tempo longe um do outro, tentando reencontrar o que aconteceu quando se olharam, esse terror de que ainda não tinham nenhum conhecimento.

Ela diz que sempre que ele fala em se ir embora ela ouve os cães da morte na cabeça e à volta da casa.
Ela pergunta-lhe: Para o estrangeiro, fazer o quê? Ele não sabe, talvez nada, talvez um livro. Talvez encontrar alguém. Espera como se fosse por um último encontro antes de morrer.
Ela dorme. Ele fala-lhe enquanto ela dorme.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair

“She is there. Mingled with both the colors and the shadow. Ever sad from some ill unknown to her. Born like that. With that blue in her eyes.”
― Marguerite Duras, Blue Eyes, Black Hair