Crear flujos de trabajo ágiles para mejorar la gestión de los proyectos
Aprende a crear flujos de trabajo eficaces de gestión de proyectos ágiles. Explora los tipos de flujo de trabajo, los componentes clave y las prácticas recomendadas para aumentar la eficiencia del equipo.
Crea objetivos de proyecto claros y alcanzables con la plantilla gratuita de flujo de trabajo
Define los pasos, asigna tareas y haz un seguimiento del progreso para mantener tus proyectos por el buen camino con un flujo de trabajo estructurado.
Cada equipo de software sigue un proceso para realizar el trabajo. Establecer ese proceso como un flujo de trabajo hace que sea estructurado, repetible y escalable.
Entender por qué los flujos de trabajo son esenciales ayuda a los equipos a gestionar las tareas que siguen una secuencia específica, lo que garantiza el cumplimiento eficiente de las metas del proyecto. Cuando se combinan con un alcance de proyecto bien definido, los flujos de trabajo ayudan a mejorar la planificación del proyecto y otras fases de la gestión del proyecto.
Los flujos de trabajo respaldan tu proceso de toma de decisiones, te ayudan a alcanzar los objetivos de manera más eficiente y a ofrecer resultados estrechamente alineados con las necesidades y objetivos empresariales.
Aquí definiremos los flujos de trabajo y sus diferentes tipos, describiremos las fases clave de los flujos de trabajo eficaces de gestión de proyectos dentro de la metodología ágil y ofreceremos pasos específicos para ayudarte a ti y a tus equipos a crear los flujos de trabajo de proyectos más eficientes.
¿Qué es un flujo de trabajo?
Un flujo de trabajo define una secuencia de pasos del flujo de trabajo que guían un proyecto de principio a fin. Los flujos de trabajo suelen implicar varios pasos que deben completarse en un orden específico.
Cada flujo de trabajo detalla las funciones, los procesos y las tareas necesarias para lograr los objetivos del proyecto y garantizar su finalización.
Los diferentes tipos de flujos de trabajo
En el desarrollo de software se utilizan varias metodologías populares de gestión de proyectos, como la metodología ágil, DevOps, Kanban, Lean, la metodología Waterfall y la híbrida.
Cada metodología tiene sus propias funciones y flujos de trabajo que la hacen adecuada para tipos particulares de proyectos y necesidades empresariales. Las organizaciones dependen de diferentes flujos de trabajo para abordar los requisitos empresariales específicos:
Los flujos de trabajo secuenciales siguen una secuencia de tareas estricta y ordenada para garantizar la coherencia, mientras que los flujos de trabajo paralelos ofrecen eficiencia, por lo que varias tareas o departamentos pueden funcionar simultáneamente. Los flujos de trabajo de máquina de estados son flexibles para cambiar entre estados en función de las condiciones o los comentarios.
Los flujos de trabajo centrados en el sistema están automatizados y gestionados por máquinas, mientras que los flujos de trabajo centrados en las personas dependen de las personas para su aprobación o verificación. Los flujos de trabajo personalizados están diseñados para satisfacer las necesidades organizativas únicas, el flujo de trabajo manual requiere la intervención humana y los flujos de trabajo digitales se administran mediante software.
Se pueden integrar varios flujos de trabajo para gestionar procesos empresariales complejos que involucren diversas tareas y partes interesadas. Una herramienta de flujo de trabajo es un software diseñado para ayudar a crear, ejecutar y administrar estos flujos de trabajo de manera eficaz.
Los flujos de trabajo Kanban, Lean, Waterfall e híbridos son especialmente populares entre las empresas de fabricación y servicios. Los desarrolladores de software también las utilizan, pero el desarrollo de software utiliza la metodología ágil más que cualquier otra metodología, que será el tema central de este artículo.

Componentes del flujo de trabajo
Cada proceso de flujo de trabajo eficaz se construye a partir de componentes principales, lo que guía la actividad desde el inicio hasta la finalización.
Estos componentes incluyen tareas o actividades claramente definidas, la secuencia específica en la que se realizan estas tareas y los recursos o insumos necesarios en cada paso. Las organizaciones crean flujos de trabajo eficientes que minimizan el esfuerzo manual y agilizan los procesos al determinar estos elementos.

La importancia de los flujos de trabajo ágiles de gestión de proyectos
Los flujos de trabajo ágiles proporcionan una ruta estructurada para la ejecución de proyectos, lo que ayuda a los equipos de desarrollo a lograr y garantizar la claridad, la eficiencia y la coordinación a lo largo del ciclo de vida del proyecto.
Al igual que los flujos de trabajo de los procesos, ofrecen una ruta estructurada que proporciona claridad y previsibilidad para las tareas y los hitos del proyecto. Además, ayudan a gestionar el proceso de entrega del proyecto al coordinar todas las actividades desde el inicio hasta la finalización.
Los flujos de trabajo ágiles agilizan las tareas y reducen los cuellos de botella. Se puede mejorar rápidamente la productividad permitiendo a los equipos concentrarse en tareas de alto valor.
La implementación de flujos de trabajo ágiles eficaces genera un impacto empresarial significativo al garantizar que los proyectos críticos se alineen con las metas de la organización y que los recursos se asignen para maximizar el valor.
Fases de un flujo de trabajo eficaz de gestión de proyectos
Un flujo de trabajo de gestión de proyectos garantiza la coherencia y la fiabilidad en la ejecución del proyecto al proporcionar un enfoque estructurado para gestionar las tareas y los procesos. Normalmente progresa a través de las siguientes cuatro fases:
Inicio: define las metas, el alcance y los recursos iniciales del proyecto.
Planificación: los equipos desglosan las tareas, crean planificaciones y asignan recursos.
Ejecución: se implementan las tareas de acuerdo con el plan y se gestiona el rendimiento del equipo.
Supervisión y control: se hace un seguimiento del progreso y se ajusta para garantizar el éxito del proyecto y la mejora continua.
La automatización del flujo de trabajo puede agilizar estas fases al reducir el esfuerzo manual y aumentar la eficiencia. Un sistema de gestión del flujo de trabajo y varios sistemas de flujo de trabajo ayudan a gestionar, monitorizar y optimizar cada fase para un mejor desempeño organizativo.
Identificar y gestionar los pasos del flujo de trabajo dentro de cada fase es crucial para mejorar la eficiencia. Los componentes básicos de un flujo de trabajo incluyen entradas, tareas y salidas, que forman la base para una gestión eficaz del flujo de trabajo.
Cómo crear un flujo de trabajo ágil para garantizar el éxito del proyecto
1. Define las metas esenciales del proyecto
Esbozar los objetivos, las entregas y las restricciones del proyecto. Colabora con los miembros del equipo, las partes interesadas y los líderes empresariales para entender sus expectativas y optimizar la alineación de los objetivos de tu proyecto con las necesidades y los objetivos empresariales.
2. Desglosa las tareas y los hitos para realizar ajustes más rápidos
Divide el proyecto en tareas gestionables y establece hitos asertivos pero alcanzables para ellas. Equilibra cuidadosamente el deseo de ofrecer resultados rápidamente con los recursos disponibles. Considera la posibilidad de ofrecer resultados que se ajusten a las metas y objetivos previstos con un mínimo de errores o modificaciones.
3. Asigna tareas y responsabilidades para que las partes interesadas rindan cuentas
Asigna tareas y responsabilidades a los miembros del equipo en función de las habilidades y la disponibilidad. Utiliza herramientas de gestión de recursos para obtener información precisa y completa sobre la disponibilidad de los miembros del equipo.
Esto ayuda a evitar tareas conflictivas o superpuestas de personas críticas. Asignar una propiedad y responsabilidades claras también ayuda a garantizar la responsabilidad dentro del equipo.
4. Crea un cronograma y una planificación para alinearte con las expectativas
Crea un cronograma detallado con plazos y dependencias claros. Resalta todos los posibles conflictos o retrasos conocidos y previstos.
Desglosar las tareas y los hitos en los cronogramas de los proyectos proporciona estructura y facilita el seguimiento del progreso al identificar las dependencias y los posibles cuellos de botella.

5. Monitoriza el progreso y ajústalo sobre la marcha
Asegúrate de contar con flujos de trabajo y procesos eficaces para supervisar el progreso, identificar las incidencias y realizar los ajustes necesarios para mantener tu proyecto en marcha. Siempre que sea posible y apropiado, incluye medidas que respalden los esfuerzos.
Workflow management and automation
La gestión y la automatización del flujo de trabajo son factores clave de la eficiencia y la productividad en las organizaciones modernas. Implica definir, analizar y optimizar el flujo de información y tareas dentro de los procesos comerciales.
Las empresas obtienen un mayor control sobre sus flujos de trabajo al implementar sistemas de gestión de flujos de trabajo, lo que infunde confianza en cada paso del proyecto para ejecutarlo mejor de acuerdo con las reglas comerciales establecidas.
La automatización lleva la gestión del flujo de trabajo al siguiente nivel mediante el uso de la tecnología para gestionar tareas repetitivas y procesos rutinarios. La automatización robótica de procesos es una poderosa herramienta para automatizar la entrada de datos, el procesamiento de documentos y otras actividades manuales.
Con funciones como las funciones de arrastrar y soltar, el análisis predictivo y los flujos de trabajo basados en reglas, las organizaciones diseñan y automatizan fácilmente los flujos de trabajo complejos. Esto reduce el esfuerzo manual y los errores humanos, acelera el procesamiento y mejora la eficiencia del flujo de trabajo.
Desafíos comunes para la gestión del flujo de trabajo y soluciones útiles
A pesar del poder transformador de la gestión del flujo de trabajo, las organizaciones suelen enfrentarse a desafíos de flujo de trabajo comunes. Estas incidencias incluyen procesos poco claros, flujos de trabajo ineficientes y la falta de herramientas adecuadas de gestión del flujo de trabajo.
Cada uno puede provocar retrasos, un mayor esfuerzo manual y mayores costes operativos. Para abordar estos desafíos, las empresas pueden implementar sistemas y herramientas de gestión del flujo de trabajo que brinden visibilidad y control sobre todos los aspectos de sus flujos de trabajo.
La automatización de las tareas repetitivas con la automatización robótica de procesos reduce el esfuerzo manual y agiliza las operaciones.
Al analizar periódicamente los flujos de trabajo y aprovechar el software de administración del flujo de trabajo, las organizaciones pueden identificar las ineficiencias, optimizar los procesos y lograr importantes ahorros de costes.
Estas mejoras conducen a una mayor productividad, una mejor toma de decisiones y procesos de negocios más eficientes, lo que ayuda a las organizaciones a alcanzar sus metas y mantener una ventaja competitiva.
Prácticas recomendadas para la automatización de flujos de trabajo

Los flujos de trabajo eficaces te permiten automatizar y estandarizar múltiples tareas y procesos de gestión de proyectos. Las funciones de automatización de Jira agilizan los flujos de trabajo y potencian los procesos al eliminar los cuellos de botella y escalar las operaciones de los proyectos.
Puedes mejorar aún más el valor de tus flujos de trabajo con estas prácticas recomendadas:
Comunícate con claridad. Establece una comunicación frecuente y regular con tus equipos. Anímalos a compartir cualquier información que pueda afectar a su capacidad para mantener su esfuerzo por buen camino.
Implica a las partes interesadas. Las partes interesadas afectadas por tus proyectos también pueden afectar a esos esfuerzos. Mantenlos comprometidos a lo largo de cada proyecto, fomenta su apoyo y aborda sus preocupaciones de forma rápida y creíble.
Mejora de forma continua. Recopila los comentarios de los desarrolladores y las partes interesadas. Toma nota detallada de lo que ha ido bien y de todo lo que no. Usa esa información para impulsar ajustes y mejoras graduales en esos resultados, flujos de trabajo y procesos.
Apuesta por la sencillez. Los procesos complejos son difíciles de entender, implementar y ajustar. Estos son algunos estados de flujo de trabajo recomendados:
Aprovechar la investigación de operaciones y la inteligencia artificial puede optimizar los flujos de trabajo mediante la aplicación de métodos analíticos avanzados y automatización para resolver problemas complejos y mejorar la eficiencia.
Optimiza los flujos de trabajo de gestión de proyectos con Jira
Los flujos de trabajo eficaces pueden proporcionar una base firme y flexible para que los proyectos de desarrollo ágil tengan un éxito constante y para avanzar hacia la mejora y la entrega continuas. Los procesos bien diseñados te ayudan a ti y a tus equipos a desarrollar, ejecutar y gestionar esos flujos de trabajo.
Con los flujos de trabajo de Jira, facilitas el seguimiento de las tareas, la colaboración en equipo, la gestión de incidencias y la generación de informes, a la vez que sigues la metodología ágil y otros enfoques de gestión de proyectos.
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